¿Para qué sirve el líquido de transmisión?
El sistema de transmisión de un coche funciona correctamente cuando las piezas móviles en su interior están bien lubricadas y no sufren daños por el intenso calor generado durante su funcionamiento. El líquido de la transmisión juega un papel esencial, garantizando que los cambios de marcha del vehículo se realicen correctamente. El líquido de transmisión negro es una señal de alarma que indica varios problemas en el sistema.
La función del líquido de transmisión
El líquido de transmisión es un catalizador importante que ayuda a las piezas del motor dentro de la caja de cambios a refrigerarse y a funcionar de manera fluida y estable. Su función varía según el tipo de transmisión:
- En vehículos con transmisión manual: El líquido actúa como lubricante, refrigerante y agente de limpieza para las piezas de fricción internas.
- En coches automáticos: El líquido de transmisión automática (ATF) funciona tanto como lubricante para los engranajes como fluido hidráulico.
Al reducir la fricción entre los distintos componentes del sistema, el fluido sufre ciclos de calor extremo que pueden alterar su color. Con el aumento del kilometraje y la antigüedad del coche, puede volverse negro debido a la combustión o a la acumulación de residuos.
El aceite de transmisión en coches nuevos suele ser rojo, a veces rosa o marrón claro. Sin embargo, el color del líquido de transmisión cambia con el tiempo debido al esfuerzo al que se somete durante la conducción. Si al revisarlo observas que se ha vuelto negro, debes cambiarlo inmediatamente por uno nuevo para evitar daños en el sistema de transmisión.
El líquido de transmisión negro significa que su efecto lubricante se ha anulado completamente debido a la oxidación. Esto puede provocar problemas de aceleración, cambios de marcha y, en el peor de los casos, una falla total de la transmisión. Una inspección regular y un mantenimiento oportuno pueden evitar estas consecuencias.
Líquido de transmisión negro: Medidas a tomar
Cuando el líquido se asemeja al alquitrán o desprende un olor a quemado distintivo, puedes tomar las siguientes medidas:
Limpiar todo el sistema
La recomendación general es drenar completamente la transmisión. Debes reemplazar el filtro y llenar con el nuevo líquido correcto, el recomendado en el manual del propietario. Utilizar un tipo incorrecto o incompatible con el vehículo puede ser desastroso para todo el sistema de transmisión.
No realices una limpieza con flujo forzado
No laves o realices un flush al líquido de transmisión negro. Este método puede causar graves daños al empujar suciedad y otras partículas grandes o residuos hacia los pequeños espacios y grietas del sistema de transmisión. También existe el riesgo de dañar objetos diminutos pero importantes o piezas de transmisión delicadas.
Nunca llenes un sistema de transmisión sucio
¿Estás pensando en poner líquido nuevo en una transmisión automatizada sucia (con más de 150.000 millas) que tiene líquido negro? ¡No es una buena idea! Es probable que varias piezas de la transmisión ya estén destruidas si el líquido huele a quemado, parece demasiado espeso o muestra una capa visible de depósitos. Reemplazar solo el líquido en este estado puede provocar una falla completa de la transmisión.
El nuevo fluido podría degradar aún más el sistema al transferir los lodos a pequeñas grietas. Lo mejor en estos casos sería cambiar todo el sistema de transmisión. Esto tiene un coste elevado, pero al menos se elimina el riesgo de una avería en medio de la autopista.
Colores del líquido de transmisión: ¿Qué significan?
Un dato que quizás no conozcas es que, con el tiempo, el color del líquido de transmisión cambiará. Esto puede deberse a que el vehículo funciona en condiciones climáticas adversas o a la fricción entre las piezas del sistema. Existen varios casos en los que un cambio de color del aceite de transmisión puede indicar que nuestro vehículo tiene problemas:
Marrón claro
Con el tiempo, el líquido de transmisión pasará de rojo claro a marrón claro. En este caso, puedes estar tranquilo; no es necesario cambiar el líquido, ya que aún conserva un buen efecto lubricante.
Marrón oscuro
A partir de esta etapa, el líquido de transmisión está contaminado. En este punto, el líquido ya no lubrica eficazmente el sistema. Si insistes en usarlo, causará daños fácilmente.
Líquido negro
El aceite de transmisión negro significa que su efecto lubricante se ha neutralizado completamente debido a la oxidación. En este caso, debes cambiar el líquido de inmediato para evitar dañar el sistema de transmisión.
Rosa claro
Puede parecer increíble, pero si el aceite se vuelve rosa claro, es muy probable que el sistema de transmisión contenga agua mezclada, lo que podría dañar fácilmente los engranajes.
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Reflexiones finales
En resumen, si ves líquido de transmisión negro, sustitúyelo por el correcto, evita las limpiezas con flujo forzado y cambia todas las piezas de la transmisión si hay olor a quemado. Utiliza la varilla medidora para verificar el estado del líquido a intervalos regulares.