¿Qué son los amortiguadores y los puntales?
Muchos conductores desconocen lo esenciales que son los amortiguadores y los puntales para la seguridad del vehículo. Como todos los componentes del sistema mecánico, los amortiguadores y los puntales pueden desgastarse con el tiempo. Es crucial saber cuánto duran los amortiguadores y cuándo reemplazar los amortiguadores y los puntales para detectar fallos y proteger la seguridad de tu coche.
Mucha gente utiliza estos términos indistintamente, pero los amortiguadores y los puntales son dos partes diferentes del sistema de un automóvil. Forman parte del sistema de suspensión que absorbe los impactos y las vibraciones cuando el coche circula por la carretera.

La suspensión puede ser de varios tipos, pero la más común consiste en una combinación de amortiguadores y puntales. En los vehículos modernos, los amortiguadores suelen ubicarse en las ruedas traseras, mientras que los puntales se encuentran en el eje delantero. Su función es amortiguar los movimientos laterales del vehículo provocados por carreteras irregulares.
Los conjuntos de amortiguadores y puntales trabajan constantemente, ya sea que el coche esté en movimiento o no. Por esta razón, se deterioran más rápidamente. Pero, ¿cuánto duran los amortiguadores y cuál es la vida útil de los puntales?
¿Cuánto duran los amortiguadores?
La vida útil de los amortiguadores, así como de los puntales, es de al menos 4 a 5 años. Sin embargo, esto depende en gran medida de las condiciones de la carretera. La duración puede extenderse hasta los 10 años si conduces principalmente por pavimento liso. Del mismo modo, puede ser inferior a 5 años si circulas habitualmente por caminos desiguales llenos de grietas y baches.
Algunos expertos utilizan el kilometraje para evaluar el estado de los amortiguadores y los puntales. La regla general es que los amortiguadores duran al menos 80.000 kilómetros antes de necesitar un reemplazo. Pero, una vez más, es difícil predecir una cifra exacta en lo que respecta a la duración de los puntales o la vida útil de los amortiguadores. Es probable que no alcancen esa longevidad si el vehículo ha circulado con frecuencia por carreteras en mal estado.
Entonces, ¿cuánto duran los amortiguadores? Las cifras habituales son 5 años o 80.000 km. Pero esto puede variar significativamente según el estado de las carreteras. La misma regla se aplica a los conjuntos de puntales.
Síntomas de amortiguadores y puntales en mal estado
Una vez que los amortiguadores y los puntales comienzan a desgastarse, se deterioran con rapidez. Los sellos y juntas empiezan a ceder, y el fluido o gas interno comienza a fugarse.

Presta atención a estas señales, ya que te alertan de un fallo inminente en los amortiguadores y puntales:
- Humedad o fugas: Presencia de humedad en la parte superior de estos componentes o goteras en los laterales, en el caso de unidades hidráulicas.
- Inestabilidad trasera: Sensación de que la parte trasera del coche está “suelta” o más rebotadora de lo normal.
- Ruidos sospechosos: Sonido de golpeteo proveniente de la suspensión trasera o delantera.
- Conducción incómoda: Circular por carreteras irregulares se vuelve especialmente molesto debido a sacudidas y traqueteos excesivos.
- Asentamiento anómalo: El vehículo no se asienta correctamente a la altura del suelo.
- Rebotes excesivos: Si notas que tu vehículo rebota de manera exagerada después de pasar por un bache o irregularidad, podría ser un signo de amortiguadores o puntales desgastados. El rebote es más pronunciado y al vehículo le cuesta más recuperar la estabilidad.
- Mala maniobrabilidad y estabilidad: Unos amortiguadores y puntales en mal estado pueden reducir la estabilidad del vehículo, causando un balanceo o inclinación excesiva en las curvas. Puedes sentir una pérdida de control o una sensación de flotabilidad durante la conducción.
- Fugas de líquido evidentes: Si observas fugas de aceite o fluido en el exterior de los amortiguadores o puntales, es un indicio claro de daño interno. La presencia de líquido significa que los sellos internos se han deteriorado y el componente debe ser reemplazado.
Mantenimiento y seguridad
Un mantenimiento regular y revisiones por parte de un mecánico cualificado son indispensables para garantizar el correcto funcionamiento de tu sistema de suspensión. Un profesional puede evaluar el estado de los amortiguadores y determinar si es necesario un reemplazo basándose en factores como el desgaste, las fugas o la disminución del rendimiento.
No olvides que unos amortiguadores desgastados afectan negativamente al manejo, la frenada y la seguridad general de tu vehículo. Por lo tanto, es fundamental solucionar cualquier problema de forma inmediata.