El veto a las placas de matrícula ofensivas en Illinois
Cada año, el estado de Illinois publica una lista de solicitudes de placas de matrícula personalizadas que han sido rechazadas por considerarse ofensivas, obscenas o confusas. Esta práctica, convertida en tradición, revela los límites del ingenio automovilístico y la constante vigilancia de las autoridades para mantener la decencia en las carreteras. El proceso de selección es estricto y busca evitar referencias a drogas, violencia, lenguaje soez o mensajes de odio.
Casos emblemáticos del 2025: PRIUSSY y más
Entre las combinaciones vetadas para el año 2025, destaca el intento de usar “PRIUSSY”, un juego de palabras que mezcla el modelo de automóvil híbrido Toyota Prius con un término vulgar en inglés. Esta solicitud fue denegada de inmediato. Pero no fue la única. La lista incluye intentos claros de burlar los filtros con referencias veladas a drogas ilícitas, lenguaje sexualmente explícito y abreviaturas de frases ofensivas. Algunas combinaciones buscan ser graciosas, pero caen en el terreno de lo inapropiado para un espacio público.
¿Por qué se rechazan estas placas?
El Departamento de Vehículos de Illinois cuenta con un comité de revisión y software especializado para analizar cada solicitud. Los criterios son amplios: no se permite nada que pueda incitar al odio, ser discriminatorio, hacer apología de la violencia o ser groseramente obsceno. También se rechazan combinaciones que puedan confundirse con identificadores oficiales de emergencia o que sean difíciles de leer para las fuerzas del orden. El objetivo final es garantizar que las placas no creen un ambiente hostil o ofensivo para otros ciudadanos en la vía pública.
La delgada línea entre lo personal y lo prohibido
Este proceso anual pone de manifiesto el eterno conflicto entre la libertad de expresión personal y la regulación estatal en espacios regulados. Mientras que los conductores pagan una tarifa extra por personalizar su matrícula, ese privilegio no es absoluto. La revelación de la lista sirve también como recordatorio público y disuasorio para futuras solicitudes, mostrando claramente los límites que no se deben cruzar si se desea que la placa sea aprobada.