¿Has notado que tu coche acelera más lento de lo normal y tiene dificultades para subir pendientes? No busques inmediatamente fallos en el encendido o el suministro de combustible. Si además de estos síntomas, el pedal del embrague tiene mucho juego libre y a veces hay un desagradable olor a quemado en el interior, el problema podría ser el deslizamiento del embrague. Te explicamos por qué ocurre y cómo deberías evitarlo.
Deslizamiento del embrague: Dónde está el problema
El funcionamiento normal del sistema depende de la fuerza de fricción entre el disco conducido y el volante de inercia. Si por alguna razón el coeficiente de fricción disminuye, las superficies de contacto comienzan a deslizarse y el par no se transmite completamente del motor a la transmisión. Como resultado, el vehículo tarda más en acelerar hasta una velocidad determinada y su rendimiento se reduce. Además, superar pendientes o cuestas se vuelve más difícil porque la potencia transmitida al eje de la transmisión no es suficiente para mover el vehículo.
Las 5 causas más comunes del deslizamiento del embrague

- Desgaste o daño del material de fricción y de la superficie del disco. Si el material de fricción está excesivamente desgastado, su grosor se reduce y no puede presionar adecuadamente contra la superficie del volante de inercia. La fuerza de compresión del mecanismo es insuficiente para fijar sus elementos. Un material de fricción deformado se presiona de manera desigual contra el volante de inercia.
- Contaminación por grasa/aceite del material de fricción. Esto reduce la rugosidad. Debido al bajo coeficiente de fricción, los elementos de contacto se deslizan.
- Debilitamiento o daño del muelle de diafragma. Si la elasticidad del muelle disminuye, la presión sobre el disco conducido al pisar el pedal es insuficiente para activar la unidad.
- Fallo en el mecanismo de accionamiento del embrague. En vehículos con embrague mecánico, un cable estirado o una horquilla dañada, y en vehículos con embrague hidráulico, la hinchazón de componentes de goma o un sellado deficiente de los elementos también pueden causar deslizamiento del embrague. Esto se debe a que la presión sobre el diafragma es insuficiente para garantizar un contacto firme de los componentes del embrague.
- Daño en el mecanismo de compensación de desgaste. Un fallo en el anillo de ajuste o en el muelle sensor hace imposible ajustar el juego libre. Esto resulta en una presión de sujeción reducida sobre el disco conducido.
6 recomendaciones que ayudarán a evitar el deslizamiento del embrague

- Sustituye los componentes del sistema en kit. La vida útil media del plato de presión, el disco conducido, el muelle de diafragma y el cojinete de empuje es aproximadamente la misma, alrededor de 100,000 a 150,000 kilómetros. Por lo tanto, para que el sistema funcione el mayor tiempo posible, sustituye siempre los componentes del kit.
- Verifica la estanqueidad de los componentes y conjuntos del vehículo. Juntas de calidad inferior o dañadas en el motor y la transmisión, fugas de aceite del retén del eje primario o del cigüeñal, y un sellado deficiente en el actuador hidráulico pueden causar la contaminación por grasa/aceite del material de fricción.
- Selecciona los componentes según tu estilo de conducción. Los embragues estándar con material de fricción de composite son adecuados para una conducción suave y tranquila. Ofrecen un coeficiente de fricción óptimo, bajas temperaturas de funcionamiento y bajo coste. Sin embargo, para coches deportivos, es preferible equipar un embrague especial diseñado para cargas pesadas. Su material de fricción está hecho con aditivos de carbono o kevlar, mezclas de cobre, aluminio, hierro fundido o cerámica. Resisten temperaturas mucho más altas, tienen alta resistencia al desgaste y son adecuados para una conducción agresiva.
- Comprueba el ajuste correcto de la carrera del pedal. Una carrera del pedal insuficiente impide el desacople completo del embrague. Esto provoca un desgaste acelerado del material de fricción y puede causar sobrecalentamiento y deformación del disco conducido.
- Utiliza siempre el fluido operativo recomendado por el fabricante. No mezcles fluidos de diferente composición. Los compuestos agresivos que se pueden formar como resultado de la mezcla, o los componentes contenidos en ciertas clases de fluidos, pueden ser perjudiciales para el actuador hidráulico del embrague.
- Respeta las siguientes reglas de operación del embrague:
- Al arrancar, primero libera la presión del pedal para que el coche empiece a moverse y comience a rodar suavemente, luego mantén el pedal a medio embragar durante 2-3 segundos y libéralo completamente.
- No arranques a altas revoluciones.
- En pendientes pronunciadas descendentes, engrana la primera marcha y pisa ocasionalmente el pedal del freno para evitar el sobrecalentamiento de los componentes.
- Al salir de áreas difíciles fuera de la carretera, como charcos, montones de nieve, barro, etc., utiliza un remolque si es posible.
- Durante la conducción, no mantengas el pie constantemente sobre el pedal del embrague para evitar pisarlo accidentalmente.
- No sobrecargues el vehículo, especialmente al conducir en carreteras en mal estado. Esto aumenta significativamente la carga sobre todo el conjunto.
Conclusión
El deslizamiento del embrague es una avería común que no solo hace que conducir sea incómodo, sino también peligroso. Sin embargo, en la mayoría de los casos, cualquier propietario de un coche puede prevenir el problema. Solo necesita comprar componentes de alta calidad y seguir las recomendaciones anteriores.