Preservada tras años de meticuloso trabajo, el Chevrolet Corvette personal de Zora Arkus-Duntov, el “Padre del Corvette”, es ahora una joya exhibida por el Museo Nacional del Corvette. Este hombre es una figura absolutamente crucial en la historia del deportivo estadounidense, responsable de algunos de sus momentos más importantes.
Un C3 cargado de historia y particularidades
Zora Arkus-Duntov compró este Corvette C3 nuevo en 1974, solo un año antes de dejar General Motors. Equipado con un motor 454 y una transmisión automática de tres velocidades, cuenta con dirección asistida, frenos de potencia, aire acondicionado y llantas de aluminio. Aunque inicialmente era plateado, fue repintado en verde antes de lucir su actual librea azul de dos tonos. También se encuentran toques personales, como las iniciales “ZAD” pintadas a mano en las puertas.
Un trabajo de preservación y no de restauración
El departamento de Colecciones y Preservación del museo emprendió un proyecto colosal para estabilizar el coche en su estado actual. En lugar de una restauración clásica, la carrocería fue separada del chasis para limpiar, estabilizar y preservar cada pequeño componente en sus mínimos detalles. Se tuvo un cuidado extremo para conservar todo el carácter y el alma del vehículo, como el reposabrazos de cuero desgastado por el brazo izquierdo del propio Zora.
Detalles técnicos únicos y fascinantes
Un examen cuidadoso revela detalles únicos. Las llantas montadas en el coche eran solo prototipos en esa época y no estuvieron disponibles para el público hasta 1976. También se encuentra un mando Holley montado en la consola que permite cambiar la mezcla de combustible entre rica y pobre. Sorprendentemente, este es el único Corvette que Zora Arkus-Duntov poseyó jamás.
Una pieza central para la eternidad
Después de rodar durante años, Zora vendió el coche en 1989. Posteriormente, fue donado al Museo Nacional del Corvette en su honor tras su fallecimiento en 1996. El Corvette será la pieza central de la nueva galería de exposiciones del Salón de la Fama del Corvette del museo. Es el primero de una serie de proyectos de preservación profunda destinados a conservar los mayores Corvette para las generaciones futuras.