Cuidado del radiador en verano: guía práctica

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Mantenimiento esencial del radiador en climas cálidos

Con la llegada del verano y las altas temperaturas, el sistema de refrigeración de tu vehículo se convierte en un componente crítico para el correcto funcionamiento del motor. El radiador juega un papel fundamental en la disipación del calor generado por el motor, evitando que se produzcan sobrecalentamientos que puedan derivar en graves daños mecánicos y costosas reparaciones.

Revisión periódica del líquido refrigerante

El líquido refrigerante es el elemento vital del sistema de refrigeración. Durante los meses más calurosos, verifica regularmente su nivel y estado. Asegúrate de que se encuentre entre las marcas mínima y máxima del depósito de expansión. Recuerda que nunca debes abrir el tapón del radiador cuando el motor está caliente, ya que el sistema funciona bajo presión y podrías sufrir quemaduras graves.

Limpieza de las aletas del radiador

Las aletas del radiador pueden obstruirse con insectos, polvo, hojas y otros residuos que dificultan la circulación del aire. Una limpieza regular con aire comprimido o agua a baja presión ayudará a mantener la eficiencia en la transferencia de calor. Inspecciona visualmente el frente del radiador para detectar cualquier obstrucción que pueda comprometer su funcionamiento.

Verificación del estado de los componentes

El sistema de refrigeración incluye varios elementos que deben mantenerse en óptimas condiciones. Revisa periódicamente las mangueras en busca de grietas, abultamientos o signos de desgaste. Comprueba también el estado de la tapa del radiador, ya que mantiene la presión adecuada del sistema. Un termostato en buen estado garantiza que el refrigerante circule correctamente cuando el motor alcanza su temperatura de trabajo.

Señales de alerta que no debes ignorar

Presta atención a indicadores como el testigo de temperatura en el tablero, pérdidas de líquido refrigerante bajo el vehículo, ruidos anormales del ventilador o disminución del rendimiento del aire acondicionado. Cualquiera de estas señales podría indicar un problema incipiente en el sistema de refrigeración que requiere atención inmediata.

Conducción preventiva en condiciones extremas

Durante los días particularmente calurosos, evita exigencias innecesarias al motor. En tráfico denso o atascos, monitoriza la temperatura del motor. Si notas que aumenta considerablemente, puedes activar la calefacción al máximo para ayudar a disipar el calor del sistema. Planifica tus viajes considerando las horas de menor temperatura ambiental y evita sobrecargar el vehículo.

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