Si la temperatura del motor aumenta sin razón aparente mientras conduces, probablemente haya un mal funcionamiento en el sistema de refrigeración. Si puedes descartar una fuga, la causa más probable es la entrada de aire en el circuito de refrigeración.
La solución: ¡Purgar el radiador!
La purga del radiador siempre debe realizarse correctamente. Te mostraremos qué debes tener en cuenta para restablecer la circulación sin problemas del líquido refrigerante.
¿POR QUÉ NECESITAS ELIMINAR EL AIRE?
Los sistemas de calefacción y refrigeración funcionan bajo el mismo principio: el agua está diseñada para circular en un sistema autónomo. Si entra aire, esta circulación se ve comprometida y puede resultar en una reducción de la eficiencia y posibles daños. En un sistema de calefacción, el problema puede resolverse purgando los radiadores. Lo mismo ocurre con el mecanismo de refrigeración del vehículo. Aquí también, el aire que ha entrado puede eliminarse mediante purga. De lo contrario, pequeñas burbujas de aire impiden la correcta circulación del líquido refrigerante. El resultado es una disminución de la capacidad de refrigeración y un aumento posterior de la temperatura, lo que puede provocar sobrecalentamiento. Por eso debes purgar el radiador después de cada llenado de líquido refrigerante o anticongelante.
CÓMO PURGAR UN RADIADOR
Primero, debes drenar el líquido refrigerante y eliminarlo de acuerdo con los requisitos legales. Ten en cuenta que debe eliminarse de la misma manera que eliminarías el aceite usado. Luego, tendrás que mezclar el líquido refrigerante en un recipiente limpio siguiendo la proporción especificada en las instrucciones. Si hay válvulas de purga, puedes proceder abriendo el vaso de expansión y llenándolo hasta la marca máxima con el nuevo líquido refrigerante. Luego ciérralo y arranca el motor, dejándolo en ralentí. Ahora puedes abrir un poco las válvulas de purga. Comprueba si salen burbujas. Si solo sale líquido sin burbujas, puedes continuar y cerrar las válvulas de purga. Arranca el motor, déjalo calentar y vigila el indicador de temperatura. Ajusta el ventilador a la velocidad más baja y la calefacción al máximo. Ahora puedes cerrar el vaso de expansión y la tapa del motor. En este punto, es buena idea hacer una prueba rápida y rellenar el líquido refrigerante si es necesario.
Básicamente, puedes usar estas instrucciones para cualquier modelo de vehículo. Algunos vehículos no tienen válvulas de purga, otros tienen una o varias. La posición de los purgadores también varía según el vehículo. Si no estás seguro o no te sientes lo suficientemente confiado para hacerlo tú mismo, te recomendamos encargar la purga del sistema de refrigeración a un mecánico de confianza.
PURGA DEL SISTEMA DE REFRIGERACIÓN CON PRESIÓN NEGATIVA
Para algunos fabricantes de automóviles, el proceso de purga es un poco más complicado. Algunos modelos de BMW o Porsche no pueden purgarse correctamente con las instrucciones anteriores. Por eso te mostraremos otra forma de purgar el sistema de refrigeración: con presión negativa.
Consejo: Para purgar el sistema de refrigeración con presión negativa, necesitas una herramienta especial: un dispositivo de llenado y purga del sistema de refrigeración. Este último crea primero un vacío en el circuito de refrigeración vacío. Luego puedes bombear líquido refrigerante nuevo sin burbujas al sistema a través de una manguera de succión. Al mismo tiempo, puedes verificar el circuito para asegurarte de que esté sellado y libre de fugas.
Para comenzar, atornilla el depósito de líquido refrigerante e instala y fija el adaptador universal. Conecta el aire comprimido con un máximo de 8 bares a la unidad de purga. Abre la válvula de aire comprimido y crea presión negativa. Tan pronto como se haya purgado el sistema y se haya creado el vacío, cierra la válvula. Ten listo un líquido refrigerante adecuado en un recipiente aparte. Llena la manguera de succión con líquido refrigerante para que no se aspiren más burbujas de aire. Ahora coloca la manguera de succión en el recipiente que tienes a mano. Abre la válvula en la manguera de admisión y introduce el líquido refrigerante en el sistema sin burbujas de aire. Tan pronto como el circuito del sistema de refrigeración esté lleno, cierra la válvula de admisión. Retira la unidad nuevamente y atornilla la tapa de sellado en el depósito de líquido refrigerante.
¿CUÁNDO DEBO PURGAR EL AIRE DEL SISTEMA DE REFRIGERACIÓN?
Debes purgar el radiador después de cada llenado de líquido refrigerante o anticongelante. Antes de salir de vacaciones, también es recomendable purgar el radiador como parte de una revisión general exhaustiva para evitar sorpresas desagradables durante el viaje.