
El Mercedes-AMG GT eléctrico es un tema que está agitando el mundo del automóvil. El rumor de una versión de cero emisiones del famoso coupé deportivo circula con insistencia. El reto para el fabricante alemán es importante: posicionarse frente al futuro Porsche 911 eléctrico.
Un proyecto técnicamente viable pero comercialmente incierto
En el plano técnico, Mercedes-Benz dispone de todo el conocimiento necesario gracias a su plataforma dedicada a vehículos eléctricos de alto rendimiento. El grupo ya ha desvelado tecnologías de motorización y de baterías de alto rendimiento que podrían equipar dicho vehículo. La verdadera pregunta no es si pueden hacerlo, sino si lo harán.
El desafío de la demanda del cliente para un AMG eléctrico
El principal obstáculo para la materialización de este proyecto reside en la existencia de una clientela suficiente. Los compradores de coches deportivos de gama alta, tradicionalmente apegados a los motores de combustión y al sonido característico de los V8, representan un público que podría ser difícil de convencer. Mercedes-AMG debe evaluar con precisión el potencial de este nicho de mercado electrificado.
Una competencia que se organiza en el segmento deportivo eléctrico
El panorama automovilístico se está electrificando rápidamente, incluso en el segmento de los coches deportivos. Porsche está trabajando activamente en una versión eléctrica de su icónico 911, lo que podría forzar la mano de Mercedes-AMG. La aparición de este concepto hace pensar que la marca de la estrella no quiere quedarse atrás en esta transición energética del segmento deportivo.