Una producción fuera del Reino Unido no está descartada para McLaren. Pocas semanas después de que Lotus considerara abandonar su sede histórica en Hethel, el nuevo CEO del fabricante británico de supercoches, Nick Collins, sugirió que aunque Woking seguiría siendo el corazón histórico de la marca, construir vehículos en el extranjero era una posibilidad, si resultaba pertinente.
Estrategia y reestructuración en McLaren
Encontrado durante la Monterey Car Week, Nick Collins ahora dirige McLaren Automotive junto con McLaren Group Holdings, tras la fusión con la startup eléctrica Forseven y una reestructuración que llevó a la eliminación de aproximadamente 500 puestos de trabajo. Ante el exceso de existencias en los concesionarios, la primera decisión fue reducir voluntariamente los volúmenes de producción para realinear la oferta con la demanda y preservar el valor residual de los vehículos.
Woking, el alma geográfica preservada
A pesar de estos cambios, una constante permanece: la fabricación de supercoches continuará en la «sede espiritual de la empresa», los McLaren Technology and Production Centers de Woking. Collins afirmó que este sitio seguiría siendo la base operativa «por un período muy, muy largo». El objetivo es mantener allí un nivel de producción óptimo, garantizando una calidad de clase mundial sin compromisos.
¿Qué futuro para una producción en el extranjero?
Sin embargo, el CEO indicó, sin entrar en detalles, que «algunas cosas podrían tener sentido construirlas en otros lugares», dependiendo de las capacidades óptimas de Woking. La cuestión central ahora es saber qué modelos podrían verse afectados. El mítico SUV mencionado durante años parece ser el candidato más evidente, al igual que los futuros modelos totalmente eléctricos, un ámbito donde la experiencia de Forseven podría aprovecharse.