Honda revive su legado histórico en el Gran Premio de México
En el circuito Hermanos Rodríguez, Honda celebró seis décadas de triunfos en la máxima categoría del automovilismo mundial. La escena capturó la esencia de esta conmemoración cuando frente al garage de Yuki Tsunoda apareció una joya histórica: el Honda RA272 de 1965, idéntico al que pilotó Richie Ginther en la primera victoria de la marca.
Un símbolo que conecta generaciones
La icónica monoplaza blanca con detalles del emblema japonés permaneció exhibida durante todo el fin de semana de carrera. Los aficionados pudieron admirar este vehículo que representa el momento en que Honda se convirtió en el primer fabricante japonés en ganar un Gran Premio de Fórmula 1. El contraste entre el RA272 y los modernos monoplazas creó un puente visual entre el pasado glorioso y el presente competitivo.
Tecnología que hizo historia
El RA272 de 1965 destacó por su motor V12 que revolucionó los estándares de la época. Su aparición en México sirvió para recordar cómo Honda llegó a la F1 con una filosofía basada en la innovación tecnológica y la búsqueda constante del rendimiento máximo. Esta misma mentalidad continúa guiando a la compañía en su regreso al campeonato mundial.
El futuro sobre ruedas
Mientras el RA272 descansaba en el paddock, los Honda actuales competían en pista demostrando que el espíritu competitivo de la marca permanece intacto. La celebración de estos 60 años no solo mira al pasado sino que refuerza el compromiso de Honda con el futuro de la Fórmula 1 y el desarrollo de tecnologías sostenibles para el automovilismo.