En la era moderna, el uso de energías alternativas para los automóviles es cada vez más popular. Mientras que muchas personas han oído hablar de los coches eléctricos, pocos consideran las fuentes de energía disponibles para impulsarlos. Entre las opciones de vehículos eléctricos disponibles, los coches de pila de combustible de hidrógeno han demostrado ser los más limpios del mercado. No utilizan baterías eléctricas como otros vehículos eléctricos. Además, las emisiones que salen por el tubo de escape son solo vapor de agua y calor. Esto los convierte en la opción más respetuosa con el medio ambiente entre todas las disponibles.
Principio de funcionamiento de los coches de pila de combustible de hidrógeno
Los coches de pila de combustible de hidrógeno generan electricidad mediante la conversión de gas hidrógeno. Cuando esto ocurre, solo se liberan calor y agua. No se producen emisiones tóxicas de carbono como en los vehículos convencionales. Dentro del vehículo, hay un tanque de combustible de alta presión que almacena el gas hidrógeno. En lugar de quemar el gas como un combustible normal, el gas hidrógeno fluye hacia una pila de combustible que contiene oxígeno. El gas hidrógeno se mezcla con el oxígeno y genera una corriente eléctrica necesaria para impulsar un motor eléctrico. Esto, a su vez, proporciona potencia a las ruedas y mueve el vehículo.
3 diferencias clave entre los coches de pila de combustible de hidrógeno y los coches convencionales
Si estás considerando comprar un coche de pila de combustible de hidrógeno, necesitas entender los aspectos básicos del vehículo. Aunque los coches de hidrógeno tienen muchas ventajas, también pueden tener algunas desventajas significativas para ti.
Además de que el hidrógeno produce emisiones más limpias, aquí están las tres diferencias principales entre los coches de hidrógeno y los vehículos normales. Esto te ayudará a comprender mejor el principio de funcionamiento de los coches de pila de combustible de hidrógeno y cómo pueden afectar tu estilo de vida.
- Batería pequeña – Todos los vehículos tienen una batería, pero su propósito varía según el tipo de vehículo. Los coches de pila de combustible de hidrógeno tienen una batería pequeña que solo es responsable de aumentar la aceleración. No es la fuente principal de energía para la propulsión, como en los vehículos híbridos. Además, la batería de un coche de pila de combustible de hidrógeno puede recargarse con la energía de la pila de combustible de hidrógeno. Esto hace que la batería dure mucho tiempo.
- Menos ruido – Los coches de pila de combustible de hidrógeno son mucho más silenciosos porque no tienen un motor de petróleo que emita gases de escape con un rugido. Además, la potencia es bastante rápida porque el motor eléctrico alcanza el par máximo rápidamente. Esto significa que el coche acelera rápidamente con solo un toque suave en el pedal del acelerador. Tampoco hay ruido del motor cuando el coche acelera. Probablemente, el único sonido que escuches sea el del viento soplando desde el exterior.
- Estaciones de repostaje limitadas – La única gran desventaja de los coches de pila de combustible de hidrógeno es que no puedes simplemente ir a una gasolinera convencional y repostar. Para repostar la pila de combustible, necesitas ir a una estación de hidrógeno. Desafortunadamente, no hay tantas estaciones de hidrógeno como gasolineras normales. De hecho, solo hay 39 estaciones de hidrógeno en todo Estados Unidos, y la mayoría están en California. Sin embargo, a medida que la tecnología se extienda a otros estados, se abrirán más estaciones de hidrógeno pronto.
Perspectivas
Si los coches de hidrógeno son tan buenos para el medio ambiente, quizás te preguntes por qué no se producen más. El principal argumento en contra es que el hidrógeno todavía causa emisiones cuando se produce. Actualmente, esto es técnicamente cierto porque el hidrógeno proviene del gas natural. Sin embargo, tenemos la tecnología para producir hidrógeno a partir de energías renovables más limpias. California ya ha comenzado este proceso en seis de sus estaciones de repostaje de hidrógeno. El estado exige que todas las estaciones de hidrógeno que se benefician de fondos públicos utilicen recursos renovables para al menos el 33% de la producción de hidrógeno. Se espera que este porcentaje aumente en el futuro y se extienda a otros estados.