Un impulso decisivo para la movilidad eléctrica en Alemania
El parlamento alemán (Bundestag) ha dado luz verde a la prolongación de una de las medidas fiscales más beneficiosas para los vehículos eléctricos. Esta decisión, calificada como estratégica, busca consolidar la transición hacia una movilidad de cero emisiones y ofrece certidumbre a consumidores y fabricantes en un momento clave.
¿En qué consiste la prórroga?
La medida central es la extensión de la exención del impuesto de circulación (conocido en Alemania como *Kraftfahrzeugsteuer*) para todos los vehículos eléctricos puros matriculados antes del 1 de enero de 2030. Esta bonificación, que estaba prevista que finalizara en 2025, se mantendrá activa durante cinco años adicionales. Para los propietarios, esto significa un ahorro directo y continuado en los costes anuales de posesión del vehículo.
Impacto en el mercado y la industria
La prolongación envía una señal clara de compromiso con la electrificación. Para los compradores, elimina una incertidumbre financiera a medio plazo y refuerza la rentabilidad de la opción eléctrica frente a los motores de combustión. Para la potente industria automotriz germana, supone un marco regulatorio estable que incentiva la inversión en innovación y producción de modelos eléctricos. Este apoyo fiscal es un pilar fundamental dentro del conjunto de políticas alemanas para alcanzar sus ambiciosos objetivos climáticos.
Un contexto europeo de incentivos
Alemania se alinea así con otras naciones europeas que están implementando o manteniendo beneficios fiscales para promover la adopción de coches eléctricos. Esta competencia positiva entre estados ayuda a acelerar la renovación del parque móvil, reduce la dependencia de los combustibles fósiles y mejora la calidad del aire en las ciudades. La decisión espera impulsar las matriculaciones en los próximos años, consolidando la tendencia de crecimiento del sector.