Aceite de fritura en los neumáticos. La idea puede parecer sorprendente, incluso descabellada, pero es muy real. El fabricante de neumáticos Continental ha desarrollado una tecnología innovadora que utiliza aceite de cocina usado para fabricar sus neumáticos. Una iniciativa que no compromete en absoluto el rendimiento o la seguridad de los productos, pero cuya principal virtud es decididamente medioambiental.
Una estrategia industrial orientada hacia la economía circular
Continental transforma un residuo, el aceite de cocina usado, en un recurso valioso para su proceso de producción. Este enfoque se enmarca en una lógica de economía circular, con el objetivo de reducir la huella ecológica de la fabricación de neumáticos. Así, el fabricante sustituye los aceites tradicionales, a menudo de origen fósil, por una alternativa de base biológica y reciclada.
Un balance medioambiental positivo y medible
Según Continental, el balance de esta innovación es muy positivo. Al reutilizar esta materia prima que de otro modo se desecharía, el fabricante reduce su dependencia de los recursos petrolíferos y da valor a un residuo otorgándole una segunda vida. Este avance tecnológico representa un paso más hacia una industria de neumáticos más sostenible y responsable.
Rendimiento idéntico, impacto reducido
Es esencial señalar que esta sustitución no altera en absoluto las especificaciones de los neumáticos. Las cualidades de manejo, adherencia, longevidad y seguridad siguen siendo estrictamente idénticas. Por lo tanto, el consumidor se beneficia del mismo producto de calidad, pero con un impacto medioambiental reducido, un argumento que pesa cada vez más en la elección de los conductores.