
Las luces traseras son necesarias para conducir de noche. Están ahí para que otros conductores puedan detectarte por detrás y para que puedan frenar a una distancia segura de ti si te detienes.
Por lo tanto, conducir de noche sin luces de freno ni luces traseras puede ser extremadamente peligroso. El problema es que a menudo no puedes saber si tus luces traseras y de freno están defectuosas.
Por lo tanto, es necesario que tus luces traseras y de freno funcionen. Pero a veces, hay ocasiones en las que una funciona y la otra no. ¿Por qué sucede esto?
A continuación descubriremos que hay varias razones por las que esto puede ocurrir.
Razones por las que tus luces de freno no funcionan
luces de freno
Las luces traseras de tu vehículo funcionan bien, pero cuando pisas los frenos, las luces de freno no se encienden. Es un problema extraño porque básicamente las conexiones de ambas luces provienen de la misma fuente. O una luz brilla más que la otra, o las luces traseras se apagan por completo cuando pisas los frenos.
Cualquiera que sea tu problema, hay una razón para ello y hay una solución. Echemos un vistazo a las razones de tal fallo:
1. Bombillas defectuosas
luces traseras
Los coches nuevos suelen utilizar luces LED para las luces traseras. Pero si tienes un coche más antiguo, querrás comprobar las bombillas.
Una bombilla fundida o quemada es la razón más básica de un fallo en la luz de freno. Si la bombilla utilizada en la luz de freno está defectuosa, no funcionará cuando pises los frenos. De esta manera, tu luz trasera funcionará, pero cuando frenes, tus luces de freno no lo harán. Puedes comprobar y solucionar este problema abriendo el maletero de tu coche y quitando la cubierta trasera de las luces traseras.
Desatornilla la cubierta con un juego de destornilladores y retira la bombilla presionando y girando, luego comprueba si está quemada. Si la bombilla se ha vuelto negra o el pequeño filamento interior está roto, debes comprar una bombilla de repuesto con las mismas especificaciones e instalarla de la misma manera que retiraste la bombilla vieja.
A veces, se utiliza la misma bombilla para la luz trasera y la luz de freno. Si ese es el caso, te está afectando otro problema. Esto nos lleva a la segunda razón por la que podrías encontrarte en esta situación.
2. Interruptor de la luz de freno defectuoso
Un interruptor de freno defectuoso es un problema muy común cuando tus luces de freno no funcionan. Un pequeño interruptor está instalado en tu pedal de freno para indicar cuándo se pisa el pedal.
Puedes probar el interruptor de las luces de freno con un multímetro para asegurarte de que los pines estén conectados / 0 ohmios cuando presionas o sueltas el interruptor. Hay buenos videos en YouTube que explican cómo hacerlo.
3. Fusible quemado o caja de fusibles
Todos los equipos electrónicos de un coche reciben electricidad a través de cables que pasan por una caja de fusibles. Los coches modernos tienen dos o más cajas de fusibles. A menudo hay una debajo del salpicadero y otra debajo del capó.
Debes sacar el manual de tu vehículo y conocer la ubicación del fusible de tu luz de freno. Es probable que, debido a una sobrecarga eléctrica, el fusible de la luz de freno se haya fundido. Identifica el fusible apropiado y reemplázalo por uno similar.
4. Cableado defectuoso
En raras ocasiones, también puede haber un cable roto en algún lugar. Esto puede ser difícil de encontrar porque el cableado dentro del sistema de luces de freno puede ir desde la parte delantera del coche hasta la trasera.
Una buena manera es medir el voltaje en la luz trasera cuando pisas el pedal de freno, y hacer lo mismo en el contacto del pedal de freno. Si no obtienes voltaje en uno de los cables del interruptor de la luz de freno, hay un problema de suministro eléctrico; ya sea un fusible o un cable roto.
Una manera fácil de comprobar estos componentes
- Comprueba si obtienes voltaje en la bombilla de la luz trasera cuando pisas el pedal de freno.
- Comprueba si la bombilla está conectada a tierra.
- Si tienes tanto tierra como voltaje, tu bombilla está rota o hay corrosión.
Comprueba si tienes 12 voltios en el interruptor del pedal de freno. Si no es así, puede haber un fusible roto o un cable roto. (En raros casos, algunos coches utilizan la tierra a través del interruptor del pedal de freno, lo que lo hace más complejo). Consulta un diagrama de cableado para saberlo. - Si tienes 12 voltios en el interruptor del pedal de freno, comprueba si obtienes 12 voltios cuando presionas el interruptor. Si no, tienes un interruptor del pedal de freno roto.
- Si tienes 12 voltios saliendo del interruptor del pedal de freno pero no hay voltaje en las luces traseras, hay un cable roto o corrosión entre el interruptor del pedal de freno y las luces traseras.
Inspecciona el cableado
Si has comprobado todas las cosas enumeradas anteriormente, solo queda inspeccionar el cableado. Es posible que roedores hayan mordisqueado el cableado dentro de tu coche o que el cableado se haya deteriorado con el tiempo. Comprueba todas las conexiones y asegúrate de que todo esté correctamente conectado.
Consulta un diagrama de cableado para identificar los cables a seguir y medir.
La corrosión es también una de las principales razones por las que el cableado se vuelve defectuoso. Con el tiempo, la humedad de la lluvia y la nieve se filtra en los pequeños espacios donde se encuentran el cableado y la caja de fusibles. Esta humedad puede dar lugar a óxido que puede alterar todo el circuito electrónico.
Comprueba el interruptor de los intermitentes
En algunos vehículos, el interruptor de las luces de freno está alimentado por un solo circuito que también incluye los intermitentes. Esto no es así en todos los coches, así que consulta un diagrama de cableado para ver si los cables pasan por el interruptor de los intermitentes.
Encuentra el cable que conecta la luz de freno y el interruptor de los intermitentes y reemplázalo. Es muy probable que esta acción resuelva tu problema. Si no, no te queda más remedio que visitar a un mecánico o electricista.
Conclusión
Dado que hay muchas razones por las que la luz de freno falla mientras la luz trasera funciona, es difícil decidir cuál es la fuente del problema. En tales casos, siempre es mejor consultar el manual de usuario del vehículo o, si tienes dinero ahorrado, a un mecánico.
Puede que tengas un conocimiento limitado de electrónica y, en lugar de resolver el problema, podrías empeorarlo. Un mecánico, por otro lado, está cualificado para realizar tales trabajos. Los mecánicos también tienen el equipo adecuado para probar y resolver tu problema de luces de freno.